La infección por Helicobacter
pylori sigue siendo muy común en todo el mundo, debido a la resistencia a los
antibióticos la prevalencia está aumentando rápidamente. Esto
es particularmente evidente en países como Japón, Corea y China, en el que las
cepas resistentes a los antibióticos de H. pylori se han estudiado más
extensivamente.
De hecho, muchos países han cruzado el umbral de 15-20% para la resistencia a los antibióticos en los últimos 20 años. Durante este período de creciente resistencia a los antibióticos, la tasa de erradicación de la terapia empírica para H. pylori ha caído por debajo del objetivo del 80-90%, y las tasas de fracaso variar desde 29% en los EE.UU. y el 40% en Europa Occidental y Japón.El fracaso del tratamiento es multifactorial y requiere más estudio, pero es probablemente debido a un mal cumplimiento y resistencia a los antibióticos. Además, las tasas de reinfección no son claros y pueden influir en los fracasos del tratamiento medidos.La susceptibilidad a los antibióticos es variable en función de las diferentes cepas de H. pylori que se encuentran dentro del antro del estómago contra el corpus puede también estar contribuyendo al fracaso del tratamiento.Este hallazgo podría explicar por qué las tasas de curación son más altos en los pacientes con enfermedad de la úlcera péptica que aquellos con enfermedad no ulcerosa.
En teoría, el uso generalizado de
antibióticos puede contribuir al desarrollo y al aumento de la prevalencia de
cepas resistentes a los antibióticos de H. pylori. A nivel mundial, el consumo
de antibióticos se incrementó en un 36% entre 2000 y 2010, principalmente en
los países en desarrollo. Quizás aún más importante, uno de los mayores
aumentos absolutos de consumo se observó para los antibióticos de amplio
espectro. Este
aumento general del consumo de antibióticos también incluye un aumento global en
el consumo de los macrólidos en aproximadamente un 20% durante este período de
tiempo.
Como la resistencia a los
antibióticos se ha correlacionado con el uso de antibióticos, el continuo
aumento en el uso de antibióticos de amplio espectro en los últimos años
sugiere que
las tasas de H. pylori de resistencia a antibióticos podría estar aumentando en
paralelo. Es importante destacar que el uso previo de macrólidos y, en
concreto, la claritromicina se ha demostrado que un impacto directo en el
desarrollo de cepas resistentes a los antibióticos de H. pylori.
Debido a la importancia clínica
de la disminución de las tasas de erradicación, la variación en las tasas de
resistencia a los antibióticos y el marcado aumento con el tiempo de las tasas
de resistencia a los antibióticos en los últimos 15 años, hay una necesidad prioritaria
de determinar las tasas actuales de resistencia a los antibióticos. Tal
determinación no sólo facilitaría la selección de tratamientos con antibióticos
apropiados, sino también servir como una base potencial para la realización de
un análisis individualizado de resistencia a los antibióticos antes del
tratamiento definitivo. Por
lo tanto, un cambio de paradigma en el tratamiento hacia la adaptación de las
estrategias eficaces de tratamiento antibiótico específico del paciente puede
conducir a fracasos de tratamiento reducidos y detener la ola de creciente
resistencia a los antibióticos por H. pylori en diversas poblaciones de todo el
mundo.